El seleccionado argentino de fútbol, con el crack rosarino Lionel Messi, encendió ayer alarmas de preocupación por el flojo rendimiento que exhibió en el 0-0 ante su par rumano, en el cotejo amistoso válido por la última fecha FIFA.
Nadie le tenia fé pero gracias a Romero hoy no nos hicieron 3 goles #RESPECT
El encuentro se disputó en el estadio Nacional de la ciudad de Bucarest y el árbitro fue el italiano Gianluca Rocchi.
El equipo argentino, dirigido por Alejandro Sabella, no tuvo una buena noche en la fría Bucarest, o al menos se espera que sólo se trate de un mal día porque no funcionó en casi todas sus líneas.
El único punto positivo fue la buena actuación del arquero Sergio Romero, quien ante las exigencias del ataque rumano, que supo manejar y administrar los contraataques, respondió con solvencia, en un puesto cuestionado por los pocos minutos que disputa en su club, Mónaco.
En el primer tiempo, los dirigidos por Sabella se encontraron con un equipo rumano ordenado y aplicado, con algunos de los futbolistas con que perdió el repechaje ante Grecia, que jugó con un 4-4-1-1, sistema que cortó el circuito creativo argentino entre el capitán Lionel Messi y sus socios, Fernando Gago y Angel Di María.
Al crack de Barcelona, que vomitó en el campo de juego en los primeros minutos, se lo vio impreciso y con el correr del tiempo aumentó su fastidio, ése que aparece cuando las cosas no salen bien. En tanto, Gago repitió las últimas flojas actuaciones en Boca y a Di María le costó encontrarse con el balón.
En ataque, Gonzalo Higuaín y Sergio Agüero tuvieron pocas oportunidades porque la pelota les llegó muy poco a los pies, pero cuando la recibieron crearon peligro: a los 9', el remate de "Pipita", cara a cara, fue desviado por el arquero Tatarasanu; y a los 38' Agüero dejó dos rivales en el camino, pero el guardametas le negó el gol.
Messi "La cancha ni el arbitro me ayudo"
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